5.12.02

Menos tonto

De pequeño era un poco tonto. Creía a los adultos cuando explicaban que los mentirosos y los ladrones olían a ceniza. Hasta me confesaba de mis tentaciones. Y lo pasé fatal cuando quise hacerme de la pandilla del Eduardo, porque ellos me exigían jurar que había robado algo aquella misma semana. Entonces convencí de que me enseñara a jugar a dominó a mi hermano mayor, que disfrutó ganándome toda la tarde. Lo sabía por mi padre; cada vez que yo cogía una ficha del montón estaba robando. Ahora que soy menos tonto, lo cuento por si le sirve a alguien.

Albert Rossell

No hay comentarios: