27.9.06

Cien

NOVENTINUEVE. Es cuenta regresiva y mientras avanzo voy perdiendo oportunidades para contarlo: a medida que cuento, la cuenta es menor. Disminuye el número y aumenta la urgencia, pero no puedo parar y sigo contando sin contar: sólo faltan SESENTIUNA. Ya ves, no es fácil contar un cuento al revés... pero sigamos intentando interesarte, que en eso consiste el arte. Cien palabras tenía el párrafo en que consistía el relato, pero todo relato cobra sentido sólo al final. VEINTITRÉS palabras faltaban y ahora me quedan QUINCE, que bastarán para decirte que la literatura comienza cuando la palabra se reduce a CERO.