Algo blando bajo el pie
Hace mucho, mis abuelos solían llevarme a pasear y a dar migas de pan a las palomas. Me gustaba aquel barullo de aves apelotonadas, peleando por la comida. Y me encantaba echar a correr y ahuyentarlas a todas.
Un día sentí algo blando bajo el pie mientras corría. Al volverme vi a una aplastada en el suelo. Creí que la había matado yo, sin querer, pero mi abuela me explicó que esa paloma llevaba muerta ahí mucho rato. Ya en casa me puse las zapatillas, y entonces mi abuela se llevó mis zapatos. Voy a limpiarlos, dijo a mi madre.
Albert Rossell
No hay comentarios:
Publicar un comentario